El regreso a la casa nunca fue antes más calido apesar de ser una noche fría y llena de agua que caía del cielo. El día en el trabajo empezó más o menos así ...Había tiempo de sobra antes de entrar a realizar mis labores en donde me empleo, entonces decidí caminar por las calles, ver los aparadores, escuchar música y terminar sentado en GANTE acompañado por los audífonos, un cigarro y el clima prometido. Después de ese grato momento donde mi mente insistia en hacer bosquejos mentales entre a trabajar. Ya adentro todo era normal, al limpiar mi sección y tratar de mover la cubeta con el pie (como siempre lo hago), el recipiente topó con un borde en el suelo y se regó toda el agua que contenía. No hubo molestía de mi parte , no existió frustración , tan solo aceptación y es posible que dentro de mí conocía lo que vendría en este gran 15 de enero. Limpie mi desastre originado por mi flojera de no levantar las cosas con las manos (ahí recorde lo que me decía mi mamá "el flojo trabaja dos veces" y sonreía para mis adentros como para mis afueras).
Todo bien, el tiempo transcurría y llego la primera buena noticia de dos que me sorprenderían. Mi salario fue un poco más o un tanto más (según como se quiera ver) de lo que esperaba (AMO las sorpresas), no podía estar más feliz, agradecido y orgulloso. Ya de regreso en casa despúes de comprar un par de cosas que necesitaba revise la correspondencia en la entrada del edificio (de unos días para acá siempre la checaba por una gran razón) obteniendo lo mismo que las otras veces (nada para mi todavía), llegué a mostrar la hoja que me dio tanta alegría en la mañana , fué entonces cuando mi hermano me dijo... ¿Ya viste tu computadora?.
Acto seguido al entrar al cuarto y prender la luz, ahi estaba, en el monitor, el motivo del porque revisar la correpondencia se había vuelto en rutina...La segunda sorpresa llego...ha sido un íncreible día. Gracias destino, gracias vida, gracias a tí.
Todo bien, el tiempo transcurría y llego la primera buena noticia de dos que me sorprenderían. Mi salario fue un poco más o un tanto más (según como se quiera ver) de lo que esperaba (AMO las sorpresas), no podía estar más feliz, agradecido y orgulloso. Ya de regreso en casa despúes de comprar un par de cosas que necesitaba revise la correspondencia en la entrada del edificio (de unos días para acá siempre la checaba por una gran razón) obteniendo lo mismo que las otras veces (nada para mi todavía), llegué a mostrar la hoja que me dio tanta alegría en la mañana , fué entonces cuando mi hermano me dijo... ¿Ya viste tu computadora?.
Acto seguido al entrar al cuarto y prender la luz, ahi estaba, en el monitor, el motivo del porque revisar la correpondencia se había vuelto en rutina...La segunda sorpresa llego...ha sido un íncreible día. Gracias destino, gracias vida, gracias a tí.
2 comentarios:
No me quedaron muy claras las razones causantes de esa gran felicidad.
Me imagino que alguien muy querido te escribio dsd NY??
no seeeee...pero me da gusto saberte feliz.
Salu2
(",)
hay alguien en nueva york o qué onda?!!!
es una postal no?
pero por la sonrisa, se ve que la felicidad de verdad se apoderó de ti
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