Siempre eran vacaciones, siempre la familia reunida en la mesa dentro de la cocina. Al centro la pirinola y todos apostándole a su suerte. Primos, tias, tios, abuelita, todos esperando en su turno leer el tan esperado "TOMA TODO". Los gritos eran para el que se llevaba el dinero y los "mmmmmms" eran para el salado que era culpable de que todos desembolsarán unos pesos más. Duraba lo que tenia que durar, ni más ni menos. Hacer girar la pirinola cuando el monto habia aumentado resultaba casi imposible. La risa te ganaba, la ansiedad de tener esa montañita de monedas hacia que aventaras lejos de la mesa a tan bailarina amiga y el "buuuu" de los familiares te ponia aún más nervioso. Buenos tiempos donde la familia podia permanecer aún reunida.
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2 comentarios:
Lo recuerdo y sonrio, era realmente divertio, muy divertido toda una familia de ludopatas! jajajajajajaja
Que buenos tiempos aquellos en realidad, creo que era tanta la emoción que lo recordabamos como toda la semana asi de: "ohhh y que tal adrian se saco todo!!! como 40 pesos" eran tantos dulces por comprar jajaja y tantos pepinos con doña gina!
p.d. enfoca tu imagen jajajajaja :P
como diría el buen y difunto Pompín Iglesias... "que bonita familia que bonita familia"
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