Hoy de regreso a comer , en la misma calle donde vivo estaban unos niños con una mesa y rodeados de gente se veian brotar sonrisas de sus pequeños rostros. Y al llegar a mi casa mi mamá me comento que ellos vendian limonada y fresas con crema congeladas. El vaso lo daban a 3 pesos, además de tener también el tamaño "jarra" para los más sedientos. Y esas imágenes son las que procuro se queden en mi cabeza, niños jugando a ser comerciantes, con sonrisas como credenciales, portando alegría para que el mundo les regrese la misma alegría. No importa nada más, sonreir y sentirse orgullosos de hacer algo con su pequeña existencia. Forjando el caracter y abriendose paso antes que la mala suerte o el llamado destino los sorprenda.
Así que mi poder superior me da señales de las cosas que no debo olvidar, que las cosas no son tan serias como parecen ser, que aunque no tenga dinero siempre habrá lo que algunos llaman "suerte" , otros "milagros" como para ir a un concierto privado invitado por el mismo staff del artista. Que en el transcurso de los minutos, del día , de la vida no se me olvide nunca mirar primero mis bendiciones, de contar a mis familiares, de ver mi techo, de probar mi comida, de acostarme en mi cama...que no se me olvide hacer eso antes de refugiarme en el rencor, en la frustración, en la desilusión, en la tristeza mal encaminada.
Que no se me olvide ser un niño, que no se me olvide reir de cualquier cosa, que no se me olvide creer en las personas, que no se me olvide llorar cuando tenga ganas, que no se me olvide ser sincero, Que no se me olvide ser un niño de edad.
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